Star Camp es más que el programa de entretenimiento infantil de Iberostar; es una experiencia educativa que inculca el amor por el medio ambiente, la diversidad cultural y los hábitos saludables. Cada una de las actividades está diseñada para que los niños no solo se diviertan durante sus vacaciones en Iberostar, sino que también se lleven consigo valiosos aprendizajes y recuerdos imborrables.
Con más de 140 actividades adaptadas a su franja de edad, os queremos presentar algunas de las mejores.
Junto a los monitores, los pequeños participan en la limpieza de la playa, aprendiendo sobre el impacto ambiental de los residuos en nuestros mares. Esta experiencia les servirá para sensibilizarse sobre la importancia de mantener limpias nuestras playas y océanos desde una temprana edad.
En este juego, los niños deben trabajar en equipo para mover un balón con una lámina grande sin usar sus pies. Así, fomentamos la coordinación y el trabajo en equipo de forma entretenida.
Lo mejor para refrescarse en verano son los juegos acuáticos. En este Get Wet, los niños disfrutan de una “olimpiada acuática” con juegos variados que incluyen hinchables y clásicos como Marco Polo. ¿Hay un mejor plan para una tarde de verano que pasárselo en grande entre chapuzones y juegos de agua?
Al caer la noche, el hotel se convierte en el escenario de un emocionante juego de supervivencia. Los niños deben trabajar en equipo para "sobrevivir" al apocalipsis zombie.
Transformados en cazadores de dinosaurios, los niños exploran el hotel en busca de pistas para encontrar al "dinosaurio" perdido, una aventura que agudiza sus habilidades de observación y razonamiento.
Los niños crean sus propias obras de arte y luego las exhiben en el hotel. Esta actividad no solo es creativa, sino que también enseña a los niños sobre la diversidad y la expresión individual.
Esta es una oportunidad para que los niños muestren sus talentos únicos y sentirse estrellas por un día, ya sea cantando, bailando o haciendo malabares. Es una gran manera de fomentar la confianza en sí mismos y el respeto por las habilidades de los demás. Y quién sabe, quizás acabemos por descubrir a alguna estrella en potencia y sino, la diversión está asegurada igualmente.
Mediante una emocionante búsqueda del tesoro por el hotel, los niños aprenden sobre la importancia de la colaboración y el trabajo en equipo. Esta actividad, además, sirve para que los más pequeños conozcan cada rincón del resort, familiarizándose con las instalaciones del hotel y que acaben sintiéndose como en casa.
Los niños se convierten en pequeños chefs preparando platos sencillos y saludables. No solo se lo pasarán en grande, sino que aprenderán sobre nutrición y los beneficios de comer saludablemente.
A través de esta experiencia gastronómica, los niños usan sus sentidos para identificar diferentes alimentos, lo que les ayuda a desarrollar sus habilidades sensoriales.